Quantcast
Channel: elcinefoide
Viewing all articles
Browse latest Browse all 9

“La noche más oscura” de Kathryn Bigelow

$
0
0

“Dignificar el horror”

NocheOscuraSeré breve, al contrario que la película que nos ocupa, que si bien tiene en su pasaje central su momento más farragoso, no se eterniza ni desespera al espectador. Los tiempos cambian y el cine bélico o thriller político americano se recubre de una patina de “veracidad” y crudeza poco habitual en este tipo de productos. Lejos parecen ya las propuestas más maniqueístas de las dos últimas décadas del siglo pasado. Ahora los trapos sucios son expuestos sin aparentes tapujos. Pero, atención, bajo ese tono documental, la exaltación patriótica y el sacrificio personal (más bien obsesión enfermiza en esta película) por el bien común siguen muy presentes. Los tiempos cambian, pero no tanto.

Bigelow nos sirve un coctel bien removido, donde todos los ingredientes encajan a la perfección a nivel cinematográfico. Otra cosa es ya la intención moral de los creadores de dicho coctel y la digestión que provocará en el espectador. Los tiempos cambian, again, si bien los engendros bélicos ochenteros tenían en su mayoría la simple intención de entretener, ahora parece que el entretenimiento ha de reportar algo más. La etiqueta “basada en hechos reales” es la nueva panacea hollywoodense (le gana por goleada al timo, en la mayoría de ocasiones, del 3D). Vamos a entretenernos, sí, pero llevémonos a casa algo más, algo más importante que si no “parece que he tirado el dinero”. Las reflexiones, como los planes sociales, son mucho más sanas y divertidas cuando se improvisan sin previo planeamiento.

Técnicamente la película es impecable e impresionante, sobretodo en el tan cacareado asalto final a la residencia donde se oculta Bin laden. No se asusten, el tono documental, la excesiva jerga técnica y el ir de aquí para allá de la protagonista puede echar para atrás en un primer momento y puede estar a punto de sacar al espectador de la trama en más de una ocasión. Pero, aunque la mona se vista de seda, la película no deja de ser una película de espionaje con bastante ritmo y con sus esporádicos estallidos dramáticos y violentos. Y del carro tira una mula tozuda encarnada con firmeza por Jessica Chastain, que compone una agente de la CIA tan odiosa como frágil (miedo da). Y cuando el foide que habla estaba a punto de salirse de la película (y un poco de sus casillas) con tanta reunión express de diálogos densos y frases que casi sin decir nada quieren decirlo todo, la película da un giro, no de 180 grados, pero casi. Es entonces cuando empieza su parte más convencional y a la vez más entretenida y trepidante (si lo comparamos con el resto del metraje) que culmina en el susodicho asalto final.

Hay que agradecer que la película, a parte del modernizado exaltamiento de la patria conla-noche-mas-oscura-poster sus “mea culpa” (bastante lights) incluidos, deja cierto margen para que cada uno saque sus conclusiones. Se podría decir que la película no reflexiona sino que invita a la reflexión, eso sí, si hacemos un ejercicio de objetividad y obviamos que el punto de vista se centra solamente en la parte americana. ¿Para cuando una película sobe el “otro lado”?

¿Catarsis necesaria? ¿propaganda? ¿o tan solo otro intento de dignificar el horror? Tal vez un poco de todo eso. Agarrándonos a ese margen antes citado, que cada uno escoja.

Peligrosa arma la cultura, cuando se utiliza para mostrar la verdad, para hacer pensar, para analizar, no lo que ha pasado sino lo que está pasando. Sobretodo cuando viene de “ciertas altas instancias”. Esta es mi reflexión sin conclusión alguna.

Aprovecho para recomendar otros artefactos que tienen como eje central el terrorismo musulmán:

-       The green zone: crítica bienintencionada sobre la farsa en la que se convirtió la búsqueda de armas de destrucción masiva en Bagdad durante su ocupación por tropas estadounidenses.

-       No habrá paz para los malvados: o muestra de que aquí se puede hacer thriller frío y crudo (con toques del estilo documental tan de boga actualmente) sobre hechos actuales. Aunque su tono frío, casi ausente de dramatismo, y esquemático se convierte en su peor enemigo.

Bien, no he sido tan breve como pretendía en un principio. Pero a estas alturas ya deben estar acostumbrados a las falsas promesas.


Epílogo

Curiosa evolución la de Bigelow, de musa del cine de acción estilizado de los 90 a narradora de “las verdades” de uno de los conflictos bélicos más mediatizados de la historia reciente de su país. De su anterior etapa, mucho más ligera y disfrutable sin prejuicios, destacaríamos foidemente tres títulos:

Los_viajeros_de_la_noche-469630958-large-       Los viajeros de la noche: de recuerdo entrañable para los amantes del género fantástico. Hay que reconocer, por más que pese, que el tiempo no la ha tratado bien, Pero siempre merece la pena, por su conseguida atmósfera y por las actuaciones de Lance Henriksen (el ciborg de Aliens) y Bill Paxton (el meteorólogo de Twister), solo por este último ya valdría la pena el vistazo.

-       Le llaman Bodhi: poco elaborada trama policíaca convertida en epopeya criminal-surfista en la que el mayor aliciente era el planteamiento y ejecución de las escenas de acción. Entretenimiento puro y duro. También destacaba el carisma (o la ausencia de él, según la crítica más rígida) de sus protagonistas. Que quieren que les diga, pero se puede encontrar química, incluso física no practicada, entre Keanu Reeves y el fallecido Patrick Swayze. Este último nos dejó, tal vez, su mejor interpretación.

-       Días extraños: su película de acción más ambiciosa y pretenciosa, por que no decirlo. Irregular y de final precipitado pero más que interesante por las interpretaciones de Ralph Fiennes (el nazi de La Lista de Shindler), Juliette Lewis (la niña de El cabo del  miedo), Angela Basset (la Tina Turner de Tina) y Michael Wincott (el malo de El Cuervo), uno de los villanos más infravalorados de la década de los 90. Se avanzó a su tiempo, al dotar a casi todo el metraje de una desasosegadora atmósfera de “fin de la sociedad moderna tal y como la conocemos”, que tan de boga está actualmente (en la ficción y, tristemente, también en la realidad).



Viewing all articles
Browse latest Browse all 9

Latest Images





Latest Images